Alberto Musitaro (Alberto Martínez)

Para seguir dando pruebas y ahondar aún más en la máquina de Youtube. Aquí tenemos otro ejemplo. Su exposición al público más directa es con un pseudónimo, lo cual ya explica bastante.

Es una muestra de lo que suele ocurrir en España, profesores que dicen saber mucho y realmente son bastante mediocres, pues en su currículo aunque dice poseer el título de profesor superior de música, en la práctica su experiencia ha estado dirigida a la música moderna. Sin embargo tiene la osadía de "explicarnos" en público haciéndose ver como un influencer el por qué los músicos del piano clásico actual, son tan buenos.

15:15 Aquí le pillé, dice más o menos, que el intérprete de piano que respeta al compositor está trasnochado y resulta aburrido, y que lo que se lleva ahora es que el pianista haga lo que quiera para llamar así la atención. Esto en música moderna será lo habitual, pero en el campo de la clásica es una aberración, y por eso pasa lo que pasa. Que tampoco es que sea así del todo, muchos de estos pianistas influencers hacen sus interpretaciones tan rápidamente que, como es lógico, no les ha dado tiempo ni para intentar interiorizar/acercarse a la expresión y mensaje del creador, y sí tienen la desfachatez de mostrarnos un pseudo-caramelo que de arte tiene poco, vendiéndolo sin ningún remordimiento como la panacea de la interpretación de los dioses (ya que Internet se presta mucho a eso).

Vamos a ver, hacer con mal gusto las cosas no es rendir culto al compositor. Y, curiosamente, los más grandes intérpretes son los que respetan lo que escribieron o editaron los genios, los cuales hace falta descubrir, que no es sencillo. Interpretar, solamente con la intención de poner el toque personal lleva a desastres, como es lo que ocurre casi siempre, ya que estos intérpretes no saben componer algo que tenga un valor académico/artístico de un nivel siquiera pasable.

Incluso por algún lado he leído que la pianista tiene 33 años, cuando tiene 54 según el Wikipedia.

La foto evidentemente está muy retocada con el photoshop u otro programa.

Y como este vídeo, todos los que sube.

A mí, que me da apuro mostrar ya mi rostro, a no ser por alguna grabación que realizase, y porque creo que es contraproducente para la ética profesional, Youtube me viene a "enseñar" que quien saca la jeta, se lleva las visualizaciones y las mejores críticas, y quien no, ni un comentario siquiera. Y dichos comentarios van en favor de estos Youtubers masivos.

En sus respectivos Wikipedias (yo no tengo ni pienso hacerlo porque estoy vivo, y eso creo que debería ser para los muertos), estos personajes, alardean de sus visualizaciones como punto fuerte de sus carreras y comparando con los demás, como si este dato fuese el revelador de su talento y maestría e impacto mediático. Cuando lo que ocurre es que el público consume lo que le ponen, lo que le dan y exhiben en las narices, por simple curiosidad. Más luego algunos tienen sistemas de marketing poco loables, como a mí me ofrecieron numerosos indios, visualizaciones de pago que no he aceptado.

Yo no soy partidario de la teoría de que ya se han realizado muchas versiones atendiendo a lo que está escrito y por ello hace falta buscar otras vías. Si bien las obras de dominio público ya son y han sido utilizadas hasta la saciedad por empresas, películas, etc., para conseguir sacarle más fruto económico desvirtuándolas, el pianista clásico (que por eso es clásico) debe hacer lo contrario, buscar el máximo respeto a esas obras consideradas geniales y/o realizadas por genios universales. Obras de Arte. Y, realizar una grabación o interpretación de esas composiciones lo más fiel a la idea del compositor, conlleva muchas veces desentrañar lo que está escrito, no el albedrío, hasta llegar a una opinión convincente. Para ello la mayoría de las veces la dedicacion tiene que ser muy larga, años, lustros, decenios, toda una vida. Quien pueda, claro. De tal manera que no, no existen todavía versiones que digas, esto es insuperable, al menos para mí. Sí existen versiones antológicas, que acreditan la rigurosidad, la involucración, el talento. Pero siempre existirá ese margen de mejora, de investigación, de mayor trabajo. Además está el nivel de grabación. Nos quieren hacer ver que el vídeo es un paso más hacia adelante, y está resultando que es para atrás en la música. Antes se vendian cientos de millones de discos, y eso ya por sí solo volvía loca a toda la plana mundial. ¿Ahora ya lo tienen que ver además? No señores, la música se escucha, principalmente. La imagen incluso puede distorsionar a la música y poner el punto de atención en cosas vanas, no en el espíritu.